Amigo Félix

Ayer Sábado hizo treinta años que murió Félix Rodríguez de la Fuente, ese hombre conocido como “el amigo de los animales” fue sin lugar a dudas el naturalista más importante de este país y uno de los más importantes del mundo.

De siempre le gustó el mundo de los animales, pero sin embargo en Mil novecientos cincuenta y siete se gradúa en estomatología en Madrid, consiguiendo el Premio Extraordinario Landete Aragó nombrado en honor del pionero de la especialidad en España.

Durante dos años ejerce como odontólogo en la madrileña clínica del doctor Baldomero Sol, aunque siempre a media jornada para poder seguir dedicándose diariamente a la cetrería.

Sin embargo, en 1959, tras fallecer su padre, abandona el oficio de dentista para dedicarse definitivamente a la cetrería y a la divulgación científica.

En al año 1974, nos sentábamos frente del televisor, aun en blanco y negro que había en nuestra casa, poníamos la primera cadena ya que era la única que se podía ver y mirábamos aquella mítica serie “el hombre y la tierra".


Nos tuvo “enganchados” a la televisión hasta el año 1980, fue el diez de Marzo de ese año cuando se trasladó junto con un equipo de El Hombre y la Tierra a Alaska al circulo polar ártico, para filmar la "Iditarod Trail Sled Dog RACE", la carrera de trineos tirados por perros de esquimal más importante del mundo.

Para ello contrataron los servicios de un piloto llamado Tony Oney y de su socio, Warren Dobson, cuyo hijo llegaría a ser comandante de aviación y a contraer matrimonio, casualmente, con una piloto española.

Aunque la mayor parte del equipo viajaba habitualmente en la avioneta de Oney, una pequeña Cessna, ésta sufre una pequeña pérdida de aceite y Félix, que tenía miedo a volar, decide cambiar de aparato, y comenta poco antes de montar "qué lugar más hermoso para morir".

Tras despegar de Únala Klett, las dos avionetas vuelan casi juntas y poco después la que pilota Dobson se estrella como consecuencia del desprendimiento de uno de los hidropatines, que desequilibró el aparato.

Este volteo no pudo ser corregido por la baja altura de vuelo del rodaje, quizá la experiencia del piloto hubiera podido salvar el contratiempo de haber sucedido a mayor distancia del suelo.

Con él fallecen, además de Félix y Dobson, el cámara de Televisión Española Teodoro Roa y el ayudante Alberto Mariano Huéscar.

Oney aterriza y es el primero en alcanzar la avioneta siniestrada, el lugar exacto de la catástrofe fue Shaktoolik, población de esquimales a unos veinticinco Kilómetros de la costa del Mar de Bering, no lejos de klondik, lugar adorado por Félix desde sus adolescentes lecturas de Jack London.

El accidente, según consta en el registro de accidentes de aviación norteamericano, ocurrió exactamente a las 12:30 del catorce de marzo de 1980 hora local de Alaska.

En aquel momento existían once horas de diferencia con España, por tanto, el accidente se produjo cuando eran las 23:30 del catorce de marzo en España.

La noticia del accidente fue dada a conocer en España unas horas después, a primera hora de la mañana del quince de marzo, por lo que a veces se cree equivocadamente que murió ese día, aunque en realidad fue el catorce, precisamente el día en que cumplía cincuenta y dos años. Su muerte conmocionó el país.

Félix hizo que todos quisiésemos y comprendiésemos más a los animales, fue un defensor a ultranza del lobo, su peculiar voz fue imitada por muchos, a mí personalmente me quedó en la retina, la imagen de cuando cogió aquella anaconda para salvarla de morir y casi le muerde en la cara, Félix fue el mejor sin lugar a dudas y fue un “RARA VIS” ya que su obra fue reconocida en vida, cosa no muy normal aquí, ni en otros sitios.